¿La Yoli pretende refundar el PC desde el feminismo? Por Carlos Magdalena

Los objetivos de Yolanda Díaz, una militante  comunista del siglo XXI, son confusos, nada claros, salvo que tiene una ambición personal que no cabe en un plato de lentejas.

La Yoli primero se subía a cuchos de el Coleta y después viendo que aguantaba en el sillón, de Sánchez. Pero ahora hace el triple salto mortal con la creación desde el poder de, imaginamos, un nuevo partido de la ultra izquierda bajo el subterfugio de ?Sumar?, según ha denominado ella misma, y cuya única cabeza visible es su persona y la ciudadanía, esa ciudadanía que tanto anhela que la lleven a lo más alto.

Aunque como  dice Feijóo  de Yolanda Díaz: ?? no recuerdo por cuantas formaciones políticas ha pasado?? Y añade: ?Nace en el momento de mayor división de la izquierda?

Cuando decimos que pretende refundar el viejo Partido Comunista, que en la actualidad tiene muchos dueños y se disputan entre todos las siglas, Yolanda lo hace con una novedad y desde un atril nuevo, reivindicativo y muy actual, desde el feminismo. Es decir que, lista ella, pretende servirse del feminismo oficialista para auparse como líder indiscutible de la ultra izquierda. Tiene un look, tiene un estilo, tiene mucho marketing pero poco contenido, de ideología nada, de parafernalia toda y mucho de saber servirse de aquello que le interese, nada más, y servirse también de los restos del comunismo que pululan por España todavía en pleno siglo XXI y del desencanto a las políticas en general con unas generaciones que ven un futuro incierto y un presente negro y se agarran a la desesperada.

Para nosotros la Yoli lo único que busca es intentar perpetuarse antes  de que se peguen el batacazo en las próximas elecciones y de esa manera poder continuar con coche oficial, con secretario, Falcon y todas las prebendas que da el poder. Detrás de la fachada de la Yoli no hay nada salvo lo que hemos dicho con anterioridad, tiene toda la apariencia de una trepa y si la hubiese visto  el califa rojo Julio Anguita le daría un infarto, ese si era un comunista con ideología y contenido. La  Yoli es simplemente una mujer de su tiempo que está ahí, pasaba por ahí,  intenta quedarse tratando de servirse de algunas incautas feministas porque tiene el temor fundado de que las chicas de oro de Podemos (La Irene, Belarra and compay) la pongan en la calle porque ven que las está quitando protagonismo, eso sí con mucha finura y una sonrisa de oreja a oreja.