La amnistía, al igual que el caso Koldo, también es corrupción y afecta a nuestra convivencia. Carlos Magdalena

Para empezar se intuye que Sánchez, dado su agotamiento y presa de la corrupción de su entorno político más cercano, pretende cometer el gran error de su vida política y que finalmente le puede descabalgar del poder. Y ese error, de los muchos ya cometidos por el presidente,  no es otro que el no respetar la decisión del Tribunal Supremo adoptada por unanimidad de que hay que investigar al señor Puigdemont por presunto terrorismo. ¡Quiere puentear al Poder Judicial!

Obviar y pasar por alto la decisión del TS supone cometer prevaricación por más que se quiera atrincherar en el poder legislativo porque es él quien está dirigiendo y permitiendo que los condenados por el golpe de Estado se auto amnistien a la carta.

La amnistía tiene que decaer por ser un bodrio antijurídico y anticonstitucional, se trata de una Ley ad hoc para que Sánchez pueda seguir gobernando con los siete votos del presunto terrorista Puigdemont porque el Tribunal Supremo, al igual que la Junta de Fiscales, consideran que debe ser investigado por terrorismo. A favor de que el terrorismo practicado en Cataluña no es terrorismo sólo está Sanchez y su alter ego, el Fiscal General nombrado por Sánchez y la Teniente Fiscal. El señor Sánchez está más solo que la una. Si tira por ese derrotero finalmente, como muchas veces hemos anunciado, terminará delante de los denostados jueces en el banquillo.

Pocas salidas tiene el presidente Sánchez.

Este país aunque no se quiera es una democracia avalada por la Unión Europea y la separación de poderes es fundamental y tiene que practicarse aunque el señor Sánchez no quiera. No puede bajo ningún concepto ?pasar? de las decisiones del TS a pesar de que lleva años pasando de las sentencias de los juzgados en Cataluña cuando no le convienen, a pesar de que en el Tribunal Constitucional haya metido a su gente. El Tribunal Supremo está respondiendo en derecho frente a la inconstitucionalidad del borrador de la Ley de Amnistía por el procedimiento que pretenden aprobar con nulidad radical.

Y para finalizar la Comisión de Venecia ha redactado un borrador de la Ley de Amnistía y a pesar de que comete fallos de interpretación de la situación de España en la actualidad porque no lo enmarca en un pleito de unos condenados y siete votos para seguir gobernando el Sr.Sánchez sí que dice que nunca se podría legislar por el procedimiento de urgencia tal y como está haciendo el presidente español azuzado por el prófugo Puigdemont sino que tendría que irse por procedimiento ordinario y obtener una mayoría cualificada, luego da a entender la Comisión de Venecia que ese no es el camino y que la amnistía tendría que decaer tal y como se ha enfocado.

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