El Culebrón de la investidura de Sánchez Por Carlos Magdalena

 
Se han celebrado elecciones en Grecia y a las 24 horas se ha producido un cambio de gobierno, empezando a gobernar el líder del partido ganador. En España por nuestra atípica normativa que se mantiene, porque unas veces les va bien a un partido, y otras a otro, seguimos sin gobierno y Sánchez seguirá de presidente en funciones. 
Este dislate que está ocurriendo, recordemos primero con Rajoy y ahora con Sánchez, debería obligar o ser el acicate para homologar nuestra legislación electoral con la europea. Para empezar, debemos establecer que lo de buscar mayorías absolutas se debe a nuestra inveterada falta de diálogo parlamentario.

Aquí existe una apisonadora de listas cerradas que impiden que hablen las personas, son los portavoces y la camarilla del partido los que imponen las decisiones.

En Europa se parlamenta, en Europa se dialoga, aquí se impone. En el Reino Unido son famosas las trifulcas parlamentarias, pero sin embargo se llegan a decisiones porque lo primero está el país, aquí no, primero está el líder y después el partido, el país no cuenta. 
Y para mayor comprensión de lo que decimos recuerden la famosa frase de Alfonso Guerra: “el que se mueva no sale la foto”, dirigida a ministros, diputados etc. Ese es el motivo de querer conseguir una mayoría absoluta, el estar cuatro años imponiendo su voluntad a la oposición, sin ningún dialogo parlamentario, salvo el de trámite y de justificación de que estamos en un  
país con Parlamento porque la verdad es que la mayoría absoluta impone sus decisiones en su mandato, y celebradas nuevas elecciones llega otro partido y pone la casa patas arriba y cómo  ejemplo más desastroso las leyes de Educación de ámbito país y de ámbito autonómico Cataluña y País Vasco, hasta seis se han sucedido LODE, LOGSE, LOE y LOMCE.

Lo lógico, lo de sentido común es que si un partido gana las elecciones de forma inmediata se ponga a gobernar y durante el trayecto de la gobernanza busque los acuerdos, si hubiere, para seguir al frente del país.Y si existe afinidad se estaría a una mayoría absoluta pero no necesariamente obtenerla con fórceps.

Algunos dirían que los gobiernos durarían muy poco y otros decimos que se empezaría a conseguir otra democracia que no la actual del ordeno y mando, y enterrando un país del diálogo, la convivencia y el consenso. 
Que lo anterior es difícil, naturalmente. Pero estoy seguro que si se hubiese practicado esa formulación desde el principio no se hubiese producido el caso catalán ni el caso vasco, que a la chita callando se está independizando mucho más que el país catalán. El problema de la investidura es el problema de esta vieja España que tenemos leyes por todas partes con 17 Parlamentos que todos los días están escupiendo leyes que nadie cumple, leyes de país, de CCAA, y hasta locales que entran en conflicto sin remedio.

Lo ideal sería tener cuatro leyes fundamentales pero que se pudiese funcionar con ellas. Tenemos una Constitución que a todos los políticos se les abre la boca cuando la citan y sin embargo la Constitución ha dado ya la independencia de facto a la República Catalana y al País Vasco, y aquí no pasa nada salvo la última del gobierno catalán de Torra que denuncia al ministro español Borrell porque, dice, que espían las embajadas del País catalán. ¡Toma ya ! ¿Pero Cataluña tiene embajadas? Pues sí, las tiene. Fueron eliminadas con el art 155 pero inmediatamente fueron, no solo recuperadas sino incrementadas. La situación del país es algo más que caótica, nuestros vecinos y socios europeos nos miran por el rabillo del ojo porque no nos entienden. Y es que no nos entendemos ni los propios españoles.

Se está buscando una mayoría absoluta entre el ganador de las elecciones, el presidente en funciones Sánchez y el perdedor, el podemita Iglesias, entre un demócrata socialista  y un anti sistema. Demencial.

Y dicen, y aciertan todos los analistas, que sí se celebran otra vez elecciones quedaría el mapa electoral parecido, salvo Podemos-Iglesias que seguiría bajando, y  crecería el Partido Socialista Obrero Español. Lo que procede sería un gran acuerdo entre Ciudadanos, PP y PSOE en el que se suscribiese un acuerdo de mínimos de Estado-Pais-Europa y dejar gobernar al señor Sánchez...¡Imposible estamos en España y Europa empieza en los Pirineos!

En Europa se parlamenta, en Europa se dialoga, aquí se impone.