Oscar Camps el héroe rescatador de inmigrantes

 
La actuación del catalán Oscar Camps y otros rescatadores ¿es un acto de caridad o un negocio como otro cualquiera? Todos sabemos que cuando la situación económica es difícil y no se encuentran empleos suficientemente remunerados se crean empresas ad hoc porque el instinto de supervivencia del humano no tiene fin.
Los nichos de empleo y de empresas surgen de forma coyuntural a tenor de las necesidades de nuestra sociedad. Hace unos días salieron las cuentas del barco de Oscar Camps y se pudo comprobar que la mayor parte de su financiación es de subvención pública, y una parte donativos y anónimos.

 Y también está saliendo que el héroe catalán no es tan héroe y si un empresario sin escrúpulos con sus socorristas a sueldos

Por otra parte ya se ha demostrado que si bien inicialmente la inmigración se producía al desnudo y en barcos que salían y llegaban al destino, si no ocurrían contratiempos, en la actualidad existen barcos nodriza que llevan a los inmigrantes que previamente han pagado billete hasta las cercanías de la costa italiana o española y allí se embarcan en las pateras, es decir con transbordo y el negocio asegurado de gente que se aprovecha de la necesidad ajena. 

Con toda la caridad cristiana ¿? se produce la llamada a la ONG receptora del socorro que de forma inmediata se traslada a los buques españoles e italianos. 
 
¿Qué ha pasado en Italia? que se ha cortado ese flujo que pudimos ver por la televisión de miles y miles de inmigrantes que acudían a Italia. Al cortarse ese flujo se inició el desembarco a través del estrecho de Gibraltar donde han cruzado miles y miles con la ayuda de los buques españoles. Descubiertas las herramientas del tráfico de personas es ahora cuando el Gobierno español tiene que tomar cartas en el asunto y lo que no puedo hacer es lo que anunciaba enviando un buque de guerra, increíble, a rescatar a los inmigrantes del buque del catalán Oscar Camps en aguas jurisdiccionales de un Estado soberano que es Italia.

No se puede entrar en esa ruta, ni siquiera con visos de ganar votos porque se produce un efecto boomerang y la inmigración se frivoliza, al final van a pagar más justos que pecadores. 
Ha llegado el momento y creo que la odisea, que no ha sido, del catalán Oscar Camps con su buque Open Arms, se le tienen que quitar los papeles de navegación y desguazar el buque con el pago de una multa que tiene en ciernes y la supuesta retirada de permiso para trasladar ayuda humanitaria, y nada más.
Lo que habría que hacer es iniciar una nueva etapa en que la primera fase debería de ser, que no se va a producir, una reunión de la UE para reinvertir en esos países que pasan hambre por carecer de herramientas de producción y de dirección.

Un gran Plan Marshall de la Unión Europea. Lo que no sé puede permitir es que después del Open Arms aparezca otro buque de similares características y que cuente con el apoyo logístico del Gobierno de España.