Potes elabora su primer censo de amianto y un cronograma de retirada progresiva
El Ayuntamiento de Potes ha elaborado su primer censo municipal de instalaciones y emplazamientos con amianto y un cronograma de retirada progresiva en el que se priorizan actuaciones en función del grado de peligrosidad del material y del nivel de exposición de la población, especialmente en el caso de espacios accesibles al público o que puedan afectar a colectivos más vulnerables.
El proyecto ha sido desarrollado por la empresa Gestión de Energía y Entornos Sostenibles y ha permitido identificar y clasificar los materiales con amianto y aquellos con presunción de contenerlo, tanto en edificaciones como en otras instalaciones e infraestructuras, con independencia de su titularidad pública o privada.
Según la información obtenida la presencia de este material se sitúa principalmente en edificaciones de uso agrícola, industrial y residencial construidas entre las décadas de 1940 y 1990, periodo en el que el uso de este material fue habitual.
La metodología aplicada se ha basado en el análisis de la antigüedad de los edificios, la verificación mediante ortofotografías aéreas y satelitales, la consulta de datos catastrales y municipales y la realización de inspecciones visuales en campo, bajo criterios técnicos homogéneos recomendados a nivel europeo y estatal.
Así, el censo incluye un inventario georreferenciado de los emplazamientos detectados y un reportaje fotográfico de aquellos elementos en los que se ha constatado la presencia de amianto o existen dudas sobre su composición.
A partir de esta identificación, el cronograma de retirada establece una planificación progresiva que permitirá al Ayuntamiento organizar futuras actuaciones de desamiantado conforme a los plazos marcados por la Ley 7/2022, que fija como horizonte máximo el año 2028 para la gestión de los materiales con mayor nivel de riesgo.
En nota de prensa, el Consistorio ha subrayado que este censo se ha desarrollado con una subvención de 4.100 euros de la Consejería de Fomento, y constituye una herramienta "esencial" tanto para la planificación municipal como para reforzar la protección de la salud pública.
Asimismo, ha resaltado que sirve como documento de referencia para optar a nuevas líneas de financiación destinadas a la retirada segura de este material conforme a la normativa vigente y con ayuda de la administración para no incurrir en sobrecostes municipales.
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