Cómo montar una startup en el sector del textil

  Hasta hace un par de décadas, crear una empresa requería una inversión importante de dinero, esfuerzo y tiempo. Hoy, con el auge de las pymes y las startup, los procesos se han simplificado, de manera que cualquier emprendedor puede montar su propia empresa si tiene en cuenta algunos valores esenciales.

  La industria de la moda es quizá la que mayores iniciativas de este estilo reúne, aunque no pocas son las que fracasan en vista de que carecen de un plan. Cuando se empieza con este último en mente, las posibilidades de éxito son considerablemente mayores.

Cómo crear una startup textil

  Son varias las cualidades que identifican a una startup de la industria de la moda en la actualidad: etiquetas textiles que identifiquen a la perfección el producto, materiales de calidad, un buen mecanismo de distribución y estrategias de publicidad globalizadas son solo algunas de ellas. Antes de todo esto, la empresa debe estar sostenida con un modelo que guíe su hoja de ruta desde el inicio.

  2 son las características distintivas entre una startup y una pyme: su intención globalizadora (valiéndose de canales digitales) y su modelo de crecimiento. Para garantizar todo esto, he aquí algunos principios que se pueden seguir:

• Estudio del mercado.

    Antes de desarrollar una empresa, sin importar que esta sea del sector textil o no, es imprescindible realizar un estudio del mercado. Este no solo servirá como fundamento para determinar las necesidades de la industria que puede solucionar, sino también para ver lo viable que es el proyecto y sus posibilidades de éxito.
  
  

    Sin un estudio del mercado, cualquier startup está condenada a la ruina, incluso cuando reúna un equipo de profesionales e invierta cierta cantidad de dinero.
   

    Valorar cuáles son las empresas textiles que dominan el momento, cuál es su modelo de trabajo, cuáles son las necesidades de los consumidores que no son cubiertas por estas y qué tendencias marcarán el ritmo los próximos años es solo un ejemplo de un estudio completo.
  
  

• Crear una marca

    Después de considerar lo anterior, es momento de crear la marca. Esta siempre precederá al estudio, ya con base a este es que se pueden identificar el por qué de la empresa, el cómo y el qué. Este famoso tridente, conocido como el círculo dorado cuyo responsable no es otro que Simon Sinek, es de utilidad en el momento de determinar la filosofía de una empresa.
  
  

    El por qué (causa, motivo por el cual se inicia el emprendimiento), el cómo (la forma en que se alcanzará esa causa) y el qué (productos o servicios que se ofrecen) establecen los valores y objetivos que ayudan a alcanzar las metas propuestas. Tomemos por ejemplo el de la moda sostenible:
  
  
     - Los cambios medioambientales demandan una ética empresarial comprometida (por qué).
     - Implementar un sistema de producción con base en el upcycling (cómo).
      - Confección de prendas para consumidores que prefieren el slow fashion (qué).
  
  
    Esto es solo un ejemplo de cómo el tridente ayuda a crear una empresa, ejemplo que puede aplicarse a cualquier ramificación de la industria textil. Nunca se debe empezar por el qué directamente, así como también el por qué no debería girar exclusivamente en torno al dinero.
  
  

• Determinar el lugar y canal

    Para crear una startup no es necesario disponer de una infraestructura enorme para empezar la producción. Nada más lejos de la realidad. De hecho, lo que precisamente define a estas organizaciones es que son empresas emergentes que se están haciendo un hueco en la industria.
  
  

    Es por esto que el lugar bien puede ser un garaje espacioso, aunque si se dispone de suficiente presupuesto se puede determinar un proveedor. Con ánimo de alcanzar ese espíritu globalizador, los canales de compra deben planificarse para poder llegar a cualquier lugar para después poder ser también exportados.
  
  

• Hacer promoción

    El siguiente paso es hacerle promoción a la marca a través de estrategias de marketing. Nada impide que el emprendedor por sí solo desarrolle estas campañas después de adiestrarse apropiadamente, aunque siempre es conveniente contar con la ayuda de un especialista.
  
  

    Todos los canales de comunicación tecnológicos serán en este punto el mejor aliado de la startup, aun cuando esta se oriente a consumidores eminentemente clásicos. El tipo de promoción dependerá del grado de creatividad de sus desarrolladores, aunque siempre se deberán buscar elementos que distingan a la empresa de las demás.
  
  

• Expandirse

    Para que una startup se considere como tal, debe tener objetivos de expandirse a medio plazo. Son varias las formas en las que puede conseguirlo, aunque los principios del lean startup, growth hacker y la filosofía de la empresa gacela generalmente son útiles en todos los contextos.
  
  

    Para alcanzar esta expansión debe hacerse antes una planificación. De esta forma se irán alcanzando los objetivos mes a mes. Si se han establecido metas claras, y a la par estas se acompañan con un esfuerzo por parte de los emprendedores en alcanzarlas, solo es cuestión de tiempo para que la empresa se consolide como uno de los referentes en su área.