Llegó “el comandante Fainé” y mandó parar

¿Negociar? No cabe ninguna negociación sólo la vuelta a la legalidad de un país democrático europeo, y menos la mediación internacional. ¡Por favor! Ahora toca gestionar el órdago de Fainé, que no ha sido otra cosa que la salida de las grandes empresas de Cataluña algo impensable que pudiera suceder para los sediciosos desde Arthur Mas hasta Junqueras, que debe dimitir.

Se precisa un estadista, que por desgracia no tenemos y nos tenemos que conformar con lo que hay, y ese es el problema. Rajoy no puede  negociar a estas alturas  lo innegociable cuando tiene ahora la oportunidad histórica, por la falta de cordura y de seny de Puigdemont, Mas y Pujol, de terminar de una vez por todas con la –cuestión catalana-.

Y lo primero que tiene que hacer Rajoy es presentar a Puigdemont la factura del traslado y estancia de la GC en Cataluña, más las dietas y los daños. Y al recibo del primer envite Puigdemont debe presentar su dimisión y fijar fecha para elecciones, como dice cualquier manual democrático y de sentido común. Nada más. Se debe crear una mesa de negociación para retroceder al Estado las materias de Seguridad de los Mossos, gran fracaso del espíritu de autonomía, y la Educación como existe en Europa para tratar que la próxima generación no odie a España como la actual pujoliana. Hace falta, eso sí, consensuar una Educación Nacional para las 17 CCAA, una Educación de país para los jóvenes y no jóvenes, y no como ahora 17 Educaciones políticas independentistas y tergiversadoras de la historia que produce sonrojo a nuestros historiadores extranjeros que son legión.

Después de lo anterior procede muchas cosas, la gestión para salir del abismo en que han metido a Cataluña y España estos dos pájaros (Puigdemont y Arthur Más) meros “chusqueros” del mando que sigue teniendo Pujol y sus adláteres. Y de forma inmediata citar a los presidentes de las 17 CCAA, también a Revilla que irá gustoso, para hablar de España. Urgir que los Tribunales actúen y cumplan la Ley, y si todavía procede, aplicar el art 155 y meter a quien haya que meter en la cárcel, y siempre convocar elecciones Eso es lo que haría un estadista que no hará Rajoy porque no lo es y porque tiene detrás a otro que le sigue la estela y que puede ser mucho peor que el actual, Pedro Sánchez. Pobre España.

 ¿Y quién es el comandante Fainé? Isidro Fainé es un financiero a la vieja usanza como lo fue el finado don Emilio Botín, por cierto, su hija Ana presidente del Banco Santander sigue callada cuando tenía que haber dicho mucho y de calidad. Quizá en días u horas diga algo más que el silencio. Otro personaje que se ha ocultado apoyando el Golpe de Estado ha sido el Conde de Godó, Grande de España que no ha estado a la altura y que se ha colocado desde el principio a favor de la independencia poniendo a disposición del golpismo el diario la Vanguardia aunque a última hora ha dado una vuelta al timón. Ha recibido dinero del Govern a mansalva, un perfecto chaquetero que ha apoyado a los sediciosos. 

Si esto se resuelve, qué creemos que sí, los ciudadanos tendrían que agradecer la actuación de Fainé porque ha tenido collons para plantarse y decir con un puñetazo en la mesa a todos los catalanes -esto se acabó y no podemos seguir por ese camino-. Naturalmente que éste catalán fino, de gran olfato y que se las sabe todas defiende la pela, el capital, a los accionistas, a los empleados, al BCE y tiene el apoyo de los líderes europeos, está en la Trilateral y se encuentra encuadrado en los organismos públicos y privados-ocultos que ostentan el gran poder. Lo que queremos decir es que no se ha tirado al abismo sin paracaídas y sí con el traje de ‘Iron man’.

Isidre Fainé dispone de información privilegiada, de encuestas como tiene el gobierno, que le dicen que una minoría, en el supuesto que incluso sean 2 millones, no puede someter a una mayoría de 7 millones. Pero este financiero en el caso que nos ocupa puede decir que está libre de pecado y no como los corruptos de todo signo de los partidos políticos, no nos confundamos. Amigos lectores el comandante en Cataluña es Isidro Fainé que es quien ha mandado parar mediante un puñetazo en la mesa. Y les ha dicho a todos que la pela no se toca. Y a partir de aquí empiecen a pensar ustedes. 

Apostar por la Independencia, pensó Fainé, es una derrota segura en tiempos que se precisa uniones y estamos en la globalización. Para nosotros esta intentona, la última, acabará con más España o menos, depende de Rajoy, pero nunca en independencia. Falta, difícil, arreglar las costuras sociales de entendimiento que llevará tiempo, pero gracias a las comunicaciones se arreglaran. Y es que amigos de la boina con la nostalgia del independentismo decimonónico no se come dicen los buenos empresarios que se mojan.