¡Libertad de voto en la investidura de Rajoy¡
Ésa puede ser una solución para el PSOE y al mismo tiempo para que sirva como principio de que hay que ir al Parlamento con pensamiento, en libertad y no en una lista de relleno para ser un diputado cautivo y dar las gracias toda la vida al líder provinciano.
El diputado, salvo honradas excepciones, no es más que producto de un engranaje del voto del partido, no caben discrepancias en este sistema seudo democrático partidista en que los diputados carecen de autonomía del pensamiento, han de pensar y creer en lo que piensa el partido, su líder y entorno, o si no te vas a la calle o como decía don Alfonso Guerra “el que se mueva no sale en la foto”.
Esta solución, que empieza a calar, de dar libertad de voto, es la más idónea para mantener los platos sin romper la vajilla. Sería la solución para dar respuesta aquellos socialistas honrados, que los hay, que acuden al Parlamento por méritos propios, con pensamiento, profesionalidad y honestidad etc. y no como otros que están allí para votar con el típico, ¡mande! Esos sí que pueden votar tranquilamente un Si a Rajoy porque son los que lleva el aparatic para decir sí o no cuando le venga en gana al mandamás de turno. A esos diputados nosotros los llamamos los cabestros políticos conforme el argot taurino. Hay que cambiar la ley electoral y hay que cambiar la filosofía de partido.
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