Merkel y Obama avisan

 Sin nombrar a nadie... ¿todavía?. Igual no hace falta... todavía. En los toros, el aviso que devuelve el toro al corral es el tercero, pero la reacción casi unánime entre los expertos en economía es que el recadito no era para Grecia, ni para Irlanda, ni para Portugal, que ya han sido "intervenidos", si no que iba dedicado a España. Quien tenga oídos para entender, que entienda, que dice el Evangelio.

   En algo hay que darle toda la razón a la canciller alemana, la estabilidad económica de Europa no depende solo de las ayudas que se presten hoy a los socios que lo necesiten sino del grado de competitividad que la UE  sea capaz de mantener en el futuro. "La solidaridad es importante pero también es importante mantener la capacidad de ser competitivos", fueron sus palabras. No miraba a nadie, pero yo creo que no hay que ser un lince para ver en la imagen que devuelve el espejo, a España. No se puede ser competitivo sin modernizar la economía y la española aun vive de la dinámica del "ladrillo". Para competir hay que reformar todo lo que se ha quedado obsoleto o inoperante, adaptarse o morir es el reto, pero las famosas reformas estructurales de las que siempre se habla, laborales, territoriales o de los sistemas de protección social, siguen sin llegar a nuestro país con la seriedad que el caso merece.  Bien está que el Gobierno y el PP se prometan colaboración y lealtad mutua como hicieron el domingo Zapatero y Rajoy, pero la responsabilidad de gobernar es del Gobierno, y si no puede o no sabe que adelante las elecciones.

   El líder del PP está preocupado por la bajada de la recaudación en España y por cómo esta caída de los ingresos pueda afectar a las cuentas públicas, con razón. El Estado vive de los impuestos, y en el primer cuatrimestre la recaudación del impuesto de sociedades ha caído un 14,6 por ciento y los impuestos especiales el 4,6 por ciento; teniendo en cuenta que la previsión del Gobierno era que la primera creciese el 9,3 por ciento y la segunda el 2,3 por ciento, un desastre. Y los dos impuestos que crecen lo hacen tan débilmente que no equilibran la balanza, el IRPF el 2,6 por ciento y el IVA algo más del 10. Pero Rajoy no gobierna, solo es el líder de la oposición Llevamos un año de retraso sobre el calendario de sacrificios que el propio presidente Zapatero ofreció a los socios de la UE después de serio aviso que nos dieron hace un año Merkel y Obama, los famosos "deberes", ya saben. El segundo aviso, todavía por alusiones, está en camino. Sería una irresponsabilidad que, entretenido en la campaña de Rubalcaba, que ya ha empezado, Zapatero esperase a que Merkel y Obama nos volviesen a sacar los colores (o algo peor: tarjeta roja) para actuar.