Actitudes molestas. Por Francisco Glez-Riancho Colongues

Hay una serie de actitudes que considero molestan y supongo que a la mayoría también. Quizás sea una mezcla de educación, de descuido, de pasotismo, de inmadurez, de madurez, de conocimiento, en fin, de muchas variables que hacen que determinadas actitudes molesten y no nos gusten.

Cruzar un paso de cebra sin mirar y hablando a través del móvil. A veces paras para dejar pasar a alguien y ese alguien cruza sin mirar, sin agradecer el gesto y mirando o hablando al móvil, de todas las edades.

Aparcar ocupando dos plazas o en el lado contrario en sentido opuesto a la marcha, aunque vengan otros coches de frente.

Los lamerotondas.

El ir por la calle hablando muy alto con el móvil, es un poco molesto.

Me molesta el que fuma en la playa y apaga el cigarro ocultándolo debajo de la arena. Así como el que lleva perros sueltos por playas principales en época estival, el Sardinero o la Magdalena, por ejemplo. Quede claro que me encantan los animales y los perros especialmente.

No entiendo a esas personas que van con niños a las rocas y charcos de las playas y capturan con redeños todo tipo de animalillos, para deleite de los pequeños. Eso no es educar, eso es depredar.

Cuando vas a pasear por la senda de Mataleñas, por ejemplo, y tienes que ir apartándote porque todo el mundo que viene en contra ocupa la senda por completo, nadie se pone en fila india.

No me gusta la gente que cuando ve cualquier insecto o animalillo, lo pisa y mata porque le molesta y le puede picar. Arañas, insectos....

Hay gente que no escucha, estás en reuniones y solo habla y habla. Da igual lo que le cuentes, no le interesa tu opinión, solo habla y dice lo que le interesa. También es muy incómodo estar en reuniones con varios amigos y haya conversaciones cruzadas o alguno te acapare y no te deje seguir el hilo de la conversación general. Tampoco es agradable estar con un grupo de amigos en una reunión y que cada uno esté mirando sus wasaps, correos, etc. sin prestar atención a la propia reunión.

No me parece bien llamar por teléfono a nadie a partir de una hora determinada para charlar, como puede ser después de cenar. Otra cosa es llamar por algo importante, lógicamente para eso está el teléfono.

Lo que es vomitivo es lo que vemos en las televisiones rosas, los famosos anunciando que denuncian a su madre, padre o hermano por lo que sea, que se divorcian por cuernos, o que no le deja los niños la madre al padre o al revés o que venden exclusivas. Los trapos sucios familiares, se lavan en casa.

Los gorrones, los que no meten la mano en el bolsillo nunca y comen como fieras.

Supongo que habrá muchas más actitudes que nos molesten y otras que ahora no se me ocurren, pero estén en este escrito o no, debemos hacer lo posible por evitarlas para no molestar al prójimo.

Siempre he intentado seguir una premisa muy importante;

"No hagas a los demás, lo que no te gustaría que te hicieran a ti".