Noticias de Cantabria
Opinión 09-10-2023 07:01

¿Para qué sirven las Cumbres y la de Granada en especial? Carlos Magdalena

Para nada. O sí, seamos serios y rigurosos, ha servido para que el señor Sánchez hiciese postureo, luciese palmito, declaraciones vacuas y ya en el último día y ante la insistencia de los medios de comunicación, que poco querían saber de la reunión de líderes europeos, le preguntaran por lo que nos atañe ahora, por los pactos con los independentistas,


Es una pregunta que sin duda se habrán hecho los granadinos al ver la ciudad tomada por fuerzas de ocupación, Policía Nacional, Guardia Civil, un despliegue de más de 5000 agentes sin contar con la seguridad particular de los líderes, asistentes y toda la retahíla de equipos que acompañan a los lideres europeos. Una complicación para los granadinos y visitantes al no poder circular por la bella ciudad de Granada también conocida como la Gran Sultana.


En esta ocasión ha tocado Granada, pero en otras ocasiones toca otras ciudades y ocurre lo mismo, molestias para el ciudadano que se preguntan  ¿para qué sirven las Cumbres de la UE? Es sabido que  los acuerdos se adoptan en los despachos y se llevan para presentarse en las Cumbres ya redactados y para la firma pero en el caso de Granada no ha servido para nada o al menos no vemos los resultados. Seguimos sin un Ejército europeo como ha pedido ya muchas veces Borrell, existe desunión con Polonia y Hungría, en definitiva cada país va a sus intereses. Y lo más importante que nos afecta muy directamente es que no se sabe como frenar la inmigración desde los países árabes mientras los árabes ricos se quedan con las empresas emblemáticas europeas. Los jeques se están apropiando de los mercados empresariales, todo lo compran porque además de dinero tienen a los mejores asesores del mundo que pagan bien pagados con los petrodólares, en el caso reciente de nuestro país tenemos el ejemplo de Telefónica.


Una muestra más de esa desunión es la guerra interminable de Ucrania donde como decimos cada país va a su ritmo y no se puede parar. Por Granada estuvo unas horas el bravo Zelenski que está defendiendo con honor e hidalguía su país. Otros países como Francia o Inglaterra llegaron, estuvieron unas horas, posaron, se hicieron la foto y se marcharon.


Y llegados a este punto seguimos preguntándonos ¿para qué ha servido en especial la Cumbre de Granada? Para nada. O sí seamos serios y rigurosos, ha servido para que el señor Sánchez hiciese postureo, luciese palmito, declaraciones vacuas y ya en el último día y ante la insistencia de los medios de comunicación que poco querían saber de la reunión de líderes le preguntaban por lo que nos atañe ahora, por los pactos con los independentistas, y lograron que finalmente mencionase la palabra -amnistía-, de la amnistía para él.


Y digo de su amnistía porque es una amnistía ilegal y anticonstitucional, a la carta, para conseguir siete votos que le catapulten a seguir en contra de la opinión de los españoles en la Moncloa. Se está generando un perfecto desastre en nuestro país y todos los que tienen un mínimo de sentido común y de razón le piden que celebre nuevas elecciones y que despeje de dudas la situación de España.


Será que no, este hombre soberbio y prepotente que ha dado muestras sobradas de mentir todos los días se quedará con los siete votos (siete platos de lentejas) que le ofrece Puigdemont y éste último llegara a España, al Prat de Barcelona con honores de jefe de Estado para posteriormente asentarse de presidente de Cataluña.
 


¿Para eso queremos que Sánchez siga amigos socialistas? La degradación política en España ha llegado ya a lo más bajo y es imposible que estas cuotas sean superadas, se está destruyendo totalmente el organigrama que se forjó en los famosos Pactos de la Moncloa. Este hombre, Sánchez, destruye sistemáticamente el Poder Judicial y destruye la monarquía él solito. Mientras, el partido socialista obrero español, sus militantes, dejan hacer. Y en la oposición está Feijóo.

Parece que ha querido hacerse a un lado o que ya carece de ideas, necesitamos más "agresividad" por parte de la oposición y para hacer frente a esta destrucción de un país europeo en pleno siglo XXI, aunque sea la vieja España.

Sé el primero en comentar