Suenan tambores de elecciones

Los socios de Sánchez, que le han aupado a la presidencia del Gobierno de España, le quieren tratar como una marioneta y parece que él se quiere oponer al final.

Sus socios le pasan las facturas de la investidura, los independentistas quieren la independencia o negociarla cuanto antes y poner fechas. Los vascos del PNV a la `chita callando` han conseguido todas las "pelas" de Rajoy y de Sánchez,  votarán tanto al PSOE o al PP porque les da igual mientras consigan -lo suyo-; sólo  que su voracidad les supera y ahora quieren romper el Estado quedándose con la SS y las prisiones, éstas ya las tiene los independentistas catalanes que pueden liberar a sus presos cuando les venga en gana. Y también están los Podemos, quieren que se acabe la austeridad y que empiece el despilfarro  y el descontrol del déficit al estilo ZP, además que también quieren poder en el Gobierno y no ser un mero subalterno a la orden del “maestro”.

El principio del fin de la escapada de Sánchez, y nos referimos a su promesa de celebrar elecciones de forma inmediata que quiere incumplir, se ha producido hoy en el Congreso por arte y voluntad de quienes le han aupado al poder que han dicho NO a su Techo del Gasto y a querer gobernar sin sus “compis”. La pregunta es, ¿ha sido solo un aviso o algo más?

Ahora Pedro tiene que mover ficha y todos nos preguntamos que les dará a sus socios podemitas e independentistas, lo que piden, o más palabras y promesas. Seguro que les entretendrá unos meses pero su final tiene que ser las elecciones y cuanto antes mejor para la historia y para España. No se puede gobernar con 84 diputados de 350 diputados que tiene el hemiciclo.

En esta situación en la que nos encontramos Sánchez tiene necesariamente que mover ficha como decimos arriba, y si no la mueve no puede gobernar, y si mueve ficha tiene que moverla de tal manera que el país España no se resquebraje. Si quieren mantener los votos independentistas tiene que darles independencia y no promesas, y si quiere disponer de la izquierda radical tiene que darle una poltrona ministerial y cuota de poder. Así son las cosas y España no puede caminar. Lo más acertado en estas circunstancias no es otra salida que unas elecciones y cuanto antes, al ser posible antes de final de año.