Noticias de Cantabria
Santander 08-07-2020 11:15

Santander registró el domingo colas de 20 minutos para acceder a las playas

La alcaldesa lamenta que Costas tiene "varias playas empantanadas" y no permite al Ayuntamiento redistribuir la arena

   SANTANDER, 8 (EUROPA PRESS)

   Las playas de Santander presentaron colas de una media de 20 minutos de espera este fin de semana, en el que entraba en funcionamiento el dispositivo puesto en marcha por el Ayuntamiento con nuevos protocolos y medidas de seguridad frente al Covid-19.

   En concreto, el domingo fue el día de mayor afluencia, especialmente entre las 13.00 y las 15.00 horas y de 17.00 a pasadas las 18.00 horas, aunque los ciudadanos "no se molestan" por tener que esperar porque tienen a su disposición la información de la ocupación de las playas en tiempo real tanto en la página web habilitada para ello, playas.santander.es, como en las pantallas instaladas en los propios arenales.

   Así lo ha dicho este miércoles la alcaldesa, Gema Igual, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, en las que ha hablado sobre como están siendo los primeros días de funcionamiento del dispositivo de playas, que incluye medidas como los aforos limitados y dispositivos para su conteo, señalización y cartelería horizontal y vertical o espacios reglados para entrar y salir del agua, pasear y acomodarse en la arena.

   La regidora ha incidido en que los usuarios tuvieron que esperar el domingo una media de veinte minutos para entrar en la playa "y eso no molesto a nadie" porque el Consistorio "ha dado mucha información muy fácil y legible".

   Por otro lado, ha apelado de nuevo a la responsabilidad y ha dicho que es necesario trabajar más en la sensibilización de los ciudadanos hacia el respeto de las medidas implantadas, ya que cuando sube la marea y se reduce el espacio de arena algunos deciden "meter la toalla con calzador" en los huecos y eso puede hacer que no se respete la distancia de seguridad.

   Para ello se ha contratado a personas --auxiliares de seguridad y educadores-- que, además de controlar el acceso y el aforo, vigilan las playas para concienciar y advertir del cumplimiento de los protocolos, tal y como ha explicado la alcaldesa, que ha hecho estas declaraciones en el Palacio de Exposiciones, tras reunirse con representantes de los sectores de servicios e inmigración de la ciudad para abordar las medidas del plan \'Santander a punto\'.

   "Es extraño porque nunca nadie nos ha dicho cómo usar la playa, nunca nadie nos ha limitado la playa ni dónde ponernos ni cuánto tiempo estar, pero es que este año debe de ser así", ha dicho Igual, que ha confiado en que "con sentido común y con responsabilidad de todos, vamos a llevar bien las playas".

  PLAYAS "EMPANTANADAS"

   Por otro lado, preguntada acerca de la decisión de la Demarcación de Costas de Cantabria de no autorizar al Ayuntamiento de Santander a mejorar el estado de las playas acometiendo la redistribución de arena --según informó el propio Consistorio ayer--, la alcaldesa ha lamentado que "Costas tiene varias playas empantanadas en la ciudad".

   En primer lugar se ha referido a la de La Magdalena, en la que ha indicado que solo ha arreglado "un poco" el vallado del segundo dique porque estaba "destrozado", pero la playa sigue teniendo "unos desniveles impresionantes, es insegura y además se ha descarnado toda la arena y hay piedras".

   Y en la Segunda de El Sardinero, si la marea está baja tampoco se puede utilizar al parte del arenal porque hay "muchas piedras". "La gente se queja y está fea", ha sentenciado, criticando que Costas no actuó cuando se le pidió pero tampoco deja hacerlo al Consistorio.

   "Nosotros no lo hacemos porque no nos dejan", ha asegurado tras explicar que la idea era llevar a cabo movimientos de arena para tapar las piedras pero que la Demarcación ha advertido que hacerlo sin autorización puede llevar a un delito en el que ha avanzado que "no van a incurrir".

   Por último, ha insistido en que "los santanderinos no nos merecemos tener estas playas", al igual que las empresas de hostelería y hoteles que han estado cerrados durante el estado de alarma "no se merecen que se les reste ni una oportunidad de que puedan tener negocio" y "tampoco se merecen las quejas que sus clientes" por el estado de las playas.

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