Una carta de amor siglo XXI. por Carlos Magdalena Menchaca

Usted amigo seguro que en esta vida digital en la que nos han metido no ha escrito nunca una carta de amor. No tiene tiempo y como mucho habrá enviado a su, amante ,mujer, querida, algún emoticono diciéndola lo que quiere confesándola sus deseos.No se asuste que descubra la verdad, así funcionamos en el siglo XXI bautizado de la pandemia.

Con el emoticono tiene suficiente dirá para sus adentros. Ni se le ocurrirá mandarle una lineas diciéndola tantas cosas como antes se hacia en varios folios y hasta la carta,  iba o venía perfumada. Seguro que usted amigo de la boina nunca  ha escrito una carta de amor, seguro que no, como mucho  habrá puesto aquello de, Muy Sra mia lamento comunicarla que hoy no podré estar con usted etc. ruego me perdone y me postro a sus pies.

La vida del amor y de las relaciones ahora es diferente  luego si usted tiene o encuentra una mujer de la antigüilla persígala y no la deje escapar.  Pero si usted peina canas seguro que sabe de lo que hablo porque lo intuye. Estamos en la era digital diferente de nuestra generación siglo XX. Estoy hablando de dos o varias generaciones que entre ellas tiene muy poco en común en cuanto el contenido de amor, querencias , sentimientos etc.Y es que a veces los que quieren terminar la conversación de un tema que no quieren hablar, para ellos es tabú, miedo de descubrir sentimientos,  y te salen con , fulano siempre es lo mismo, la historia se repite y en el amor  igual y si el muchacho es un poco machista te compara con los animales, sus escarceos y el faisan y la faisana.

Las cartas que se escribían otrora eran diferentes y como muestra las tenemos en nuestra literatura y en nuestros autores más conspicuos. Se referían a su amada, la idealizaban, la querían.

Ahora quizá algunos idealistas, lo intentan hacer y se pegan una hostia morrocotuda porque su amada está educada de otra manera, carece de sensibilidad fundamental para conocerse y comprenderse, son de estados sociales diferentes y se tiene que acoplar uno al otro y el fracaso es total porque son dos pensamientos diferentes, ella o él  vive al dia, incluso en el amor, y su pareja en la quimera del amor.

Antes eran cartas comprometidas, cartas de sentimiento, de aliento, de compromiso, pero todas tenían el mismo contenido, amor.Una carta que le recomiendo es la De Ernest Hemingway a su querido “pepinillo” porque las cartas de amor  es un genero de la literatura mundial que ocultan por la deshumanización imperante.

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Ahora también se escriben cartas y nos ruborizamos porque una carta es un e-mail, una carta es un WhatsApp,  los tiempos han cambiado pero las personas siguen y las relaciones también.

He conocido e-mails WhatsApp amorosos, cariñosos, distantes, negativos, cortantes y todos tienen un común denominador, el sentimiento.Y a veces lo que parece que dice no es exacto porque esas comunicaciones son frías e inexpresivas de contenido que pueden producir equivoco porque siempre hay un pero....

Unos lo aplican de una manera y otros lo aplican e interpretan de otra dependiendo si es parte o simplemente un lector que lee un texto que quiere enjuiciar y es incapaz de saber lo que quiere decir las partes porque lo dicen dos personas que no conoce  pero inmediatamente se reconoce a la legua, hay  amor positivo o negativo pero es amor.

Incluso hay  amor cuando se fuerza una relación cuando la otra parte no te quiere después de quererte mucho, ese es el amor más intenso, duradero y recordado en la vida y del que es difícil salir. 

No se fíen, cuando ven a dos que se quieren a modo de “tortolitos”, es un autoengaño ya que  normalmente quiere uno y aguanta el otro y cuando el que aguanta quiere querer más el que quería ya no le quiere. Es aquí cuando entra la racionalidad de la persona si existe y cuando se llega al amor real y duradero.

Pero no olviden, todo se puede ir al traste cuando se tiene poca cabeza, existen influencias exógenas, se da más valor a un mal entendido, falta el dialogo o se utiliza un texto de wasap  gélido y rompedor. Es aquí cuando se diferencia el amor verdadero del cantamañero del sexo.

Lo  que nosotros queremos decir es que hay que querer de verdad o ser del cuasiayer sin  olvidar que el amor es mucho más que el romanticismo.