El PNV amenaza el gobierno "absolutista" de Sánchez

   Y si rompen, que no van a romper, porque el PNV necesita a Sánchez para progresar en la independencia, no habría PGE. Este pequeño rifirrafe cargará más todavía las alforjas de Euskadi mientras Cantabria mira al papeluco.

El lehendakari Urkullu está cansado de enterarse de las decisiones de Sánchez por los periódicos y de que las videoconferencias no sirven para nada porque Sánchez toma las decisiones como él considera desde su pensamiento unívoco. 

    Y si rompen no hay PGE o tiene Sánchez que buscarse otro socio, ¿el PP? La decisión de Pedro Sánchez de decretar el cierre de toda actividad económica «no esencial» hasta el 9 de abril ha terminado con la paciencia del PNV.

   Los vascos creían que las promesas se irían cumpliendo traspasos, cárceles, SS, y sobre todo, que las medidas se consensuasen con la palanca del gobierno de Sánchez, los independentistas del PNV. Y es que Sánchez como todos sabemos es impredecible, a veces......  Y cerrar las empresas del todo no les ha gustado a los vascos
 
 
   El lehendakari Urkullu está cansado de enterarse de las decisiones de Sánchez por los periódicos y de que las videoconferencias no sirven para nada. 

 
    Ahora ya saben los vascos que Sánchez gobierna como un rey absolutista y por esa razón ha apartado al rey Felipe VI de todo protagonismo. El  Jefe de Estado de España parece que no existe salvo algunas notas de prensa debidamente cribadas por Moncloa –El otro día acudió a IFEMA pero con un tapabocas. Pero Sánchez ya tiene bastante con lo suyo porque el socialismo de base empieza a decir ¡pero qué hace este hombre!
 
 
 
    En la cuenta oficial de Twitter, el PNV manifestó su «preocupación» por la «excesiva unilateralidad» con la que, a su juicio, ha actuado el Ejecutivo y «la falta de respeto y comunicación con instituciones, agentes y partidos que estamos actuando con total lealtad, una actitud que no vemos correspondida». Más claro no se puede decir, o cambia de criterio el señor Sánchez pasando sus actuaciones y decisiones por el filtro del PNV o  los PGE peligran.

Pero todo quedará en una pequeña borrasca del norte porque el PNV necesita a Sánchez para seguir en su estrategia y conseguir la independencia del País Vasco.