Noja instala 46 trampas para frenar el avance de la avispa asiática
El Ayuntamiento de Noja ha puesto en marcha una nueva campaña para preservar el medio ambiente y contra las especies invasoras.
De este modo, el Consistorio nojeño se suma al programa de vigilancia activa puesto en marcha por el Gobierno de Cantabria para detener el avance y desarrollo de esta especie invasora que constituye una "grave amenaza" para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, la agronomía o para los recursos económicos asociados al uso del patrimonio natural.
Una vez instaladas las trampas, se revisa su estado al menos cada 15 días, algo que corre a cargo de un técnico. Las mismas están dirigidas a las avispas reinas, que en primavera comienzan a formar los nidos.
Esta iniciativa, que se desarrolla en las proximidades de frutales y cauces fluviales, se suma a otras similares impulsadas en años anteriores para proteger la biodiversidad y "luchar contra una amenaza que afecta a la flora y la fauna autóctona" que tradicionalmente ha caracterizado a la Villa de Noja.
Y es que esta especie invasora supone un grave peligro para las poblaciones autóctonas de abejas, a las que ataca y extermina, poniendo en riesgo la continuidad de la especie y su ecosistema, pero también son una amenaza para el ser humano, ya que pueden llegar a ser muy agresivas cuando se sienten amenazadas.
Procedente de Asia, esta especie invasora fue detectada por primera vez en Europa en Francia, país del que llegó a España en 2010.
Con una velocidad de expansión estimada en unos 80 kilómetros al año, la avispa asiática busca sobre todo las zonas húmedas y con temperaturas suaves, por lo que el litoral cántabro es una ubicación ideal para ellas.
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