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Tribunales 12-02-2019 06:30

Juzgan al director de una sucursal de Reinosa que engañó a vecinos para que compraran viviendas en Madrid

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria juzgará este martes y miércoles, 12 y 13 de febrero, a partir de las 10.00 horas, por apropiación indebida para el que fuera director de la Caixa de Reinosa y un vecino de la localidad acusados de idear un plan a través del cual, en el año 2005, captaron a numerosos vecinos para que invirtieran en la compra de viviendas en Madrid, quedándose con el dinero en metálico que recibieron de estos clientes.

   La Fiscalía pide dos años de cárcel para el director de la sucursal, mientras que los perjudicados, que perdieron su dinero y no recibieron las viviendas, piden una condena de cuatro años de prisión por delito continuado de apropiación indebida, o alternativamente, cuatro años y seis meses de prisión por un delito continuado de estafa con la agravante de abuso de confianza.

   Tanto la Fiscalía como los denunciantes, nueve en total, reclaman que los acusados les devuelvan las cantidades que les dieron en metálico, que ascienden a 11.000 y 12.000 euros.

   Según el relato de hechos del fiscal, los acusados, aprovechando la relación cercana que mantenían con vecinos de Reinosa, empezaron a captar clientes para venderles viviendas en Madrid que estaba proyectado construir en Vicálvaro, gestionadas por la Cooperativa Puerta de los Pedroches.

   Tras informarles de las bondades de la inversión, los perjudicados procedieron a la suscripción de los respectivos contratos con la cooperativa, conviertiéndose en socios de la misma, para lo que abonaron los 40.000 euros exigidos para adquirir la condición de cooperativista, parte a través de transferencia bancaria y otra parte a través de la entrega de 11.000 o 12.000 euros en metálico al director de la sucursal.

   El otro acusado, que se hacía pasar por representante de una gestora de cooperativas, era quien debía hacer llegar el metálico a la cooperativa. Los denunciados no solo no reintegraron estas cantidades en metálico a la cooperativa, sino que el dinero pasó a formar parte de su patrimonio, según el relato del fiscal, que les acusa de un delito de apropiación indebida agravado, con la agravante de reincidencia.

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