Mª Trinidad Besoy, una quesera comprometida, por Pedro Arce Díez

Y hoy traigo a estas páginas a una quesera lebaniega que está al frente de la Quesería Peña Cortés, ubicada en el bello pueblo de Tanarrio, lugar recostado en una de las laderas del Val de Baró, que constituye el municipio de Camaleño.

En este bucólico lugar instaló en 1987 una quesería, Ricardo Besoy, hoy regentada por su hija, Mª Trinidad Besoy González, quien recogió el testigo en 1999 y que ejerce además el cargo de presidente de la Denominación de Origen Protegida (DOP), “Quesucos de Liébana”, que agrupa a seis queseros artesanales de los municipios de Camaleño (Quesería Baró, Quesería Peñalón, Quesería Rio Deva y la de la propia Mª Trinidad, Quesería Peña Cortés), Cillorigo (Quesería Alles) y Cabezón de Liébana (Peña Sagra, La Lolla). Entre las seis queserías utilizan casi 400.000 litros de leche de vaca, cabra y oveja con la que elaboran más de 40.000 Kg. de queso.

Son estos magníficos y deliciosos “quesucos”, elaborados tradicionalmente y que en la actualidad se hace en unas queserías que cumplen todas las normas de higiene y sanitarias, para que lleguen a los establecimientos comerciales y de allí al domicilio de muchos amantes del queso.

Los quesucos de Liébana son cilíndricos o discoidales, de pequeño formato que oscila entre 8 y 12 cm. de diámetro por 3 a 10 cm. de altura, con un peso variable y de pasta firme y compacta de color ligeramente amarillento. Su aroma y sabor son característicos y tiene un contenido de grasa no inferior al 45 %.

Mª Trinidad Besoy tiene orígenes lebaniegos, pues su padre es de Tanarrio y su madre de Bodia, pero emigraron a México y allí nació ella en 1980; su progenitores se volvieron a la tierruca y su padre comenzó la aventura quesera; ella, lebaniega donde las haya y emprendedora, ha aprendido de sus mayores a elaborar los quesucos que tanto gustan y que ha dado fama a esta comarca lebaniega; también ha completado y actualizado sus conocimientos y técnicas, como ha sucedido en otras queserías artesanas, con el apoyo de Manuel Arroyo y su empresa.

En su quesería se procesan anualmente unos 120.000 l. de leche de vaca, cabra y oveja, con la que se elaboran 14.000 Kg. de queso; además de los quesucos de la Denominación de origen, en la quesería de Mª Trinidad se elabora queso ahumado de vaca, de mezcla de vaca, oveja y cabra y queso de cabra. Cada día la demanda es más exigente y los queseros han tenido que diversificar la producción. Por otra parte, también se elabora en su quesería queso que se comercializa con la denominación “Campollo”, que es un distribuidor de Mogrovejo. Y trata cada día de superarse y por ello construyó un ahumadero para poder elaborar el queso ahumado, que tiene un sabor característico y gran aceptación entre los consumidores.

Hay un detalle curioso en Mª Trinidad y en esta quesería: no se presenta a los concursos de quesos, que tanto han proliferado en los últimos años y a través de los que muchos queseros se han dado a conocer, utilizando estos galardones como publicidad de marca.

Su ímpetu personal le hace ser una persona comprometida con cuantas actividades coadyuven al bien de todos y así la podemos ver en alguna lista electoral del pasado (2003 y 2007) y aún posee desde 2012 un establecimiento comercial en Mogrovejo –Quesos y Cosas- dónde además de comercializar sus quesos, vende productos de calidad, especialmente de Liébana, en un local que funciona como tienda y pequeño restaurante. ¡Seguro que aún le queda tiempo para llevar los quesos al mercado o darse una vuelta por Potes!.

Mª Trinidad es una de estas queseras que atendía al ganado, aunque actualmente adquiere la leche a ganaderos de la zona, realiza las labores de la casa y, además, elabora queso, buen queso; deseo que estas líneas sirvan para honrar y homenajear a todas nuestras queseras actuales y del pasado de Cantabria, en la figura de Mª Trinidad; pues sabemos que muchas de este pasado no tan lejano, lo han ejercido en condiciones muy precarias y sacrificadas.

Por ello, ¡Se lo merecen!.