Noticias de Cantabria
23-01-2018 08:00

El PSOE se zampará a Podemos, y en Cantabria también

Nos pueden decir que todavía falta tiempo para las elecciones del 2019 pero ya saben ustedes que cada uno recoge el producto de su siembra, la cosecha. Cierto que falta mucho, pero todos estamos de acuerdo que el nacimiento de Podemos fue multisocial debido más que a la crisis, que también, al hartazgo no de una izquierda sino de una clase social en general que estaba hartita de la política y sus políticos.

Esa situación fue aprovechada por unos marxistas de nuevo cuño que han tenido sus días de gloria con el fortísimo ascenso electoral que alcanzaron. Nosotros apuntábamos, y muchos más, que Podemos era flor de un día y que finalmente se reconvertiría en algo parecido a lo que fue el antiguo Partido Comunista. Cuando se ha acabado la indignación o se atempera por una mejoría de la economía, aunque sea insuficiente en salarios y empleo, los presuntos representantes de los indignados deben lanzar ideas descabelladas al ruedo político, que en realidad no piensan, para mantener su status quo conseguido con esfuerzo y es entonces cuando llegan las incongruencias, equivocaciones y errores de bulto como ha sido que Iglesias, el de la coleta, que ya ni hablan de su “famosa”, se volviese de repente independentista en Cataluña.

El varapalo ha sido total y absoluto en las elecciones del 21D. Ahora vendrán las iniciativas “a todo correr” para intentar reconvertir los errores cometidos pero la sociedad ya les ha visto el plumero independiente del fuerte lastre de credibilidad por su financiación opaca, oscura que salió a la luz, venezolana o iraní a base de cantidades recibidas por importantes “trabajos” realizados fuera de nuestras fronteras, de cosas raras que ha aireado a la prensa pero que todavía no han tenido una plasmación real en los juzgados.

El traje podemita se ha quedado sin mangas, sin hombreras, y ahora desnudo como un proyecto muy minoritario nada representativo en un siglo de la revolución tecnológica continuada en el que no se puede volver ni mirar hacia atrás salvo para aprender de los viejos errores históricos de la humanidad va “perdiendo fuelle” a pasos agigantados.

 

Los cánticos y las añoranzas políticas del siglo XIX no tienen ninguna virtualidad en el siglo XXI salvo para su estudio en las facultades. Un dato a tener en cuenta es que el PSOE de Sánchez se está centrando, Cs derechizando y el PP después del batacazo catalán está intentando mantener las sillas en la política nacional. Los ciudadanos quieren un estado de bienestar y buscan políticos sensatos para conseguir ese estado. Tampoco quieren mentiras de los políticos de todos los días que mienten hasta en las obviedades y por escrito, que no les produce ni vergüenza ni se ponen rojos cuando cambian de opinión según les vayan las aguas cuando les sacamos las hemerotecas digitales con sus contradicciones. En España y en Cantabria electoralmente hablando poco pueden cambiar las cosas salvo el trasvase de votos de Podemos al Partido Socialista Obrero Español, y aquí en Cantabria será más delo mismo a la chita callando, sin excesivo ruido y se verá en las próximas elecciones si se produce lo que muchos apuntan que es la recuperación del socialismo democrático a pesar de los gritos de los voceros de una izquierda ficticia anquilosada en las viejas formas de siglos pasados.

Sé el primero en comentar