A CANTABRIA no llegará el rebufo de Rivera ;-)

La franquicia Ciudadanos en Cantabria nació con mal pie, dicen, porque debido a las prisas por formar un partido y fruto del desconocimiento de los líderes en Madrid-Barcelona fue a parar a unas personas, que quizá no disponían, ni disponen todavía, de la imagen necesaria que necesitaba esa -non nata- formación política. Y ese, de principio, gran error, cuesta superarlo. Y para rematarlo fichan los de Madrid al conocido humorista Felisuco en la segunda fase del presunto crecimiento de Ciudadanos en Cantabria. En efecto, mientras -la marca política-, con sus más y sus menos, se fue asentando por todos los puntos de España con sus franquiciados, en Cantabria se frenaba desde el principio porque los tenedores de la sigla ponían trabas a la incorporación de nuevos miembros por el temor de perder “la moqueta”. Recuerdo nombres de personas que pidieron entrar y no lo consiguieron si bien en la actualidad ya están dentro y no cito nombres para evitar susceptibilidades muy lejos de mi intención. El aumento de la militancia en Cs en Cantabria ha sido como una leva a la romana de personas, casi todas, procedentes de otros partidos o formaciones política.

En una primera fase se quedaron con las siglas Rubén Gómez y Juan Ramón Carrancio, pero pronto llegaron las luchas internas y desembarcó Felisuco mediante el dedazo desde Madrid. Así las cosas, el primero en caer fue Carrancio y todavía no se sabe muy bien cómo fue la zancadilla, pero nadie cree que fuese por cuestiones ideológicas porque no conocemos a nadie que las tenga. Todos coinciden que no quiso asumir el nombramiento por lo que suponía de sumisión y falta de autonomía, todo se despacha en Madrid. Ya saben el slogan de los partidos políticos en este país que hizo famoso el muy reconocido Alfonso Guerra, “el que se mueva no sale en la foto”. Y en la actualidad son Rubén Gómez y Felisuco los que cortan el bacalao en la formación Cs. Por otra parte, como apuntamos arriba, se han producido entradas de “lujo” de nuevos militantes procedentes de otras formaciones que van a intentar, variar el puesto de mando, algo muy difícil en las franquicias comerciales y políticas. Ciudadanos se encuentra con grandes posibilidades en Cantabria de comerse un gran trozo de la tarta que deja el Partido Popular por estar inapetente, (por los líos internos y de corrupción) pero al día de hoy Cs en Cantabria no dispone ni de cartel, ni de infraestructura, ni de seriedad política suficiente para dar el Sorpasso al Partido Popular y eso que lo tiene fácil.

Y terminamos este pequeño análisis avanzando lo que desarrollaremos en el futuro, que todo el panel político de Cantabria está supeditado al Partido Regionalista de Cantabria. Porque si finalmente por estrategia política y para consolidar su partido, para el futuro Miguel Ángel Revilla encabeza una candidatura nacional y regional con delfín claro, y aceptado, para conseguir ese diputado añorado que Cantabria necesita, la pelota donde realmente está es en el tejado regionalista siempre que haga esa nunca ejecutada transición en el correspondiente Congreso.

Y ahora el PRC tiene que mover ficha ya que el país se va a abrir a un Estado federal, o lo que sea, y nuestra pregunta es ¿Dónde estará Cantabria? Y dónde un partido auténticamente cántabro y no supeditado a las siglas y franquicias de Madrid o Barcelona. Muchas son las preguntas sin respuesta, pero siempre lo hemos dicho, en el PNV tenemos el ejemplo a seguir.