Noticias de Cantabria
11-09-2017 10:00

Pucherazo y tente tieso…

¡Lo de Cataluña ya hastía!. Pero es un problema que tenemos ahí y que lo han creado los actuales y pasados dirigentes catalanes, en una huida hacia adelante, para librarse de sus demonios y, sobre todo, del continuo desfalco que han hecho a los propios catalanes –y españoles, no lo olvidemos- envolviéndose en la bandera catalana de las barras, y ahora ya estrellada a lo cubano, y vociferando a los cuatro vientos el “España nos roba!.

¡Qué hipocresía!. Quienes de verdad han robado y bien, han sido ellos mismos, comenzando con aquel lejano y no bien aclarado asunto de la Banca Catalana  del (presunto) mangante Jordi Pujol y siguiendo con las habituales mordidas que hicieron exclamar a Maragall aquello de “Vds. tienen un problema y se llama 3%”.

…Y “de aquellos polvos, vinieron estos lodos” y acaban de perpetrar un auténtico “Golpe de Estado”, que ya predijo Alfonso Guerra, aunque lo dulcificó diciendo que era “a cámara lenta”. No habíamos visto cosa igual desde Tejero y los españoles de bien, cumplidores de la Ley, consideramos que mientras Puigdemont, todo su gobierno, Forcadell y cuantos han contribuido a pisotear nuestras leyes, incluida la propia Constitución, en un claro desafío a los jueces, al Gobierno y a todos los españoles, deben ser juzgados e ingresar en prisión. De nada ha servido que el Consell de Garanties Estatutàries de Catalunya, formado por nueve juristas elegidos por el Parlament o los propios letrados y el Secretario del Parlamento catalán les hayan advertido clara y contundentemente de su desafuero.

¡Y queremos ver la foto de ellos, detenidos e ingresados en los furgones policiales, como ya se hiciera con Rato por mucho menos!.

No puede ser que se tomen a choteo y se rían de los Tribunales, que se pasen sus decisiones y prohibiciones por el arco de triunfo, que manipulen los medios de comunicación, que nos tomen el pelo…. ¡Esto es lo más parecido a Venezuela y Corea del Norte!. Y menos mal que aún no tienen ejército; curiosamente abominan del ejército, de nuestro glorioso ejército. También habrá que recordarles a estos osados independentistas y golpistas que “las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional” (Art. 8.1, de nuestra Constitución Española). En los EE. UU., si esta situación se hubiera dado, ya estaría actuando la Guardia Republicana.

Y tras la bochornosa manifestación contra las víctimas del execrable atentado terrorista, que devino en un vergonzoso acto independentistas, con insultos y abucheos al Rey incluidos, la Diada ha sido otra esperpéntica puesta en escena, con acoso mafioso incluido a los no independentistas. También cabría decir que miles de personas salieron a la calle proclamando independencia; pero dónde estaban los millones de catalanes, sensatos, que no quieren problemas, están asustados, acongojados y arrinconados. ¡También es hora que estos se hagan notar y muestren su rostro!

Del “referéndum”, sólo decir que lo que exista será un trampantojo y un auténtico pucherazo, al estilo venezolano. Y no estará exento de urnas y papeletas caseras, manipulación, presiones, escraches a quienes se opongan y toda clase de matonismo a que ya nos tienen acostumbrados estos independentistas catalanes, en una veloz carrera hacia el abismo.

Y además hay que decir con crudeza que toda sociedad tiene los dirigentes que ha votado y estos que actualmente tiene Cataluña, les han votado los catalanes. ¡Si, si…!; no han caído del cielo. Cada uno es dueño de sus actos y responsable de sus consecuencias.

Y deberán ser juzgados por todos sus atropellos, incluidos los delitos de sedición y rebelión “los que se alzaren públicamente”; y el propio Art. 473 de la Ley Orgánica 10/1995 de 23 de noviembre del Código Penal, dice que “los que, induciendo a la rebelión, haya promovido o sostengan la rebelión, y los jefes principales de ésta, serán castigados con la pena de prisión de quince a veinticinco años e inhabilitación absoluta por el mismo tiempo; los que ejerzan un mando subalterno, con la de prisión de diez a quince años e inhabilitación absoluta de diez a quince años, y los meros participantes, con la de prisión de cinco a diez años e inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de seis a diez años”.

Y ahora, en otro orden de cosas, ¿Quién asume las responsabilidades económicas?. Pues ha habido un enorme costo económico que no es justo que paguemos todos los españoles y, a este respecto les daré un dato: en los últimos días, la prima de riesgo ha subido un 20 % por la incertidumbre que provocan todos estos esperpentos catalanistas. Muchas empresas o ya se han ido por el “clima” existente o tienen planes de irse si este desafío no se para a tiempo. En Europa y en todo el mundo, no salen de su asombro y cualquier inversor se tentará las ropas antes de osar invertir en España…

 

¿A qué espera el Estado para actuar con toda la contundencia de la Ley?

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