La Consejería de Mazón invertirá 1,8 millones en acondicionar y ampliar el acceso a La Cárcoba

   El consejero, José María Mazón, así lo ha anunciado este viernes en Miera donde, según ha informado el Ejecutivo regional en un comunicado, ha indicado que su departamento tiene intención de licitar próximamente el proyecto con la finalidad de que las obras se inicien lo antes posible.

   Mazón ha resaltado la importancia que esta actuación tendrá para los vecinos de los barrios altos de Miera, que dispondrán, una vez concluidas las obras, de una "excelente comunicación con las garantías adecuadas de seguridad vial y la recuperación de un acceso digno a un lugar con unos paisajes extraordinarios".

   Por su parte, el alcalde de Miera, Tarsicio Gómez, ha agradecido al consejero la próxima reparación integral de la carretera que supone "una excelente noticia para el Ayuntamiento y para todos los vecinos del municipio".

   De acuerdo con las previsiones, el proyecto se licitará próximamente mediante su publicación en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC), de tal forma que las obras podrán dar comienzo en primavera del 2018.

   En el acto han estado presentes, además del consejero y el alcalde, el director general de Carreteras, José Luis Gochicoa; otros miembros de la Corporación municipal y técnicos de la Dirección General de Carreteras.

  EL PROYECTO

   El proyecto de acondicionamiento y ampliación de plataforma de la carretera CA-641, entre los puntos kilométricos 0 y 3,180, supondrá el ensanche y la adecuación de la calzada actual, desde la intersección con la carretera CA-260, Liérganes-San Roque de Riomiera, hasta la plaza existente frente a la iglesia, dentro del núcleo urbano de La Cárcoba.

   El proyecto se desarrolla en una carretera de montaña, con una pendiente media del 5 por ciento y tramos con rampas superiores al 10 por ciento. Además, existen taludes muy verticales, en ocasiones de altura considerable, anexos a la carretera.

   De esta manera, para la nueva calzada proyectada, se ha buscado combinar una anchura que genere el menor impacto posible, a la vez que permita el cruce de dos vehículos en adecuadas condiciones de seguridad.

   Por lo tanto, se establece una sección mínima de 5 metros, a lo largo de toda la calzada, incrementándose esta medida con un sobreancho en los tramos en curvas de radios reducidos, para facilitar el giro de los vehículos.

   Paralelamente, con el fin de reducir el volumen de los desmontes generados, se dispondrán distintos muros de escollera a lo largo de toda la traza.

   Debido al estado de la rasante de la carretera actual, con continuas irregularidades, se ha incluido en el proyecto la regularización de toda la superficie, con un recrecido del firme de aproximadamente 12 centímetros. de espesor medio. De la misma forma, se ha proyectado el saneo de los baches y blandones, situados en zonas puntuales del recorrido.

   Tanto en las zonas de saneo de blandones, como en las de ensanche de la plataforma, se extenderá un paquete completo de firmes con aglomerado, base granular de zahorra artificial y material para pedraplén, con la finalidad de mejorar la explanada.

   Para resolver el drenaje se instalará una cuneta de hormigón, de 60 centímetros de anchura, en las zonas de desmonte. Además, se colocan nuevos caños transversales de hormigón y se renovarán los caños o tajeas actuales que presentan un aspecto muy deteriorado o tienen una sección insuficiente.

   También se renovará toda la señalización y las barreras de seguridad, colocando además unas nuevas en zonas en las que actualmente no existen.

   Finalmente, el proyecto incluye, además, la reposición de terrenos, caminos y cerramientos existentes en las mismas condiciones y características que las presentadas previamente al inicio de las obras.