Noticias de Cantabria
19-02-2017 12:00

Las espadas siguen en alto y el próximo lunes habra otra reunión

Cospedal quiere poner orden en el Corral OK de Cantabria

JCMM.-No resulta gratificante ni a los militantes ni a los votantes que Diego, actual presidente del PP, y Buruaga, secretaria general y aspirante a Presidente tengan que acudir a ver a la hermana mayor Cospedal. Buruaga ha tomado una decisión que no ha comunicado a su compañero de armas, Diego, bien o mal, depende como se mire o interprete pero debe seguir adelante con su propia gente y no obligarla meterla gente de relleno por contentar a ....

Redacción.-
No resulta gratificante ni a los militantes ni a los votantes que Diego, actual presidente del PP, y Buruaga, secretaria general y aspirante a Presidente tengan que acudir a  ver a la hermana mayor, Cospedal. Buruaga ha tomado una decisión que no ha comunicado a su compañero de armas, Diego, bien o mal, depende como se mire o interprete pero debe seguir adelante con su propia gente e ideas y no obligarla a meter gente de relleno por contentar a unas presuntas familias políticas. Para el ciudadano las presuntas familias políticas  no son más que ”algunos o algunas" que quieren seguir a la sombra, bien de Diego antes, o ahora de Buruaga, sin pegar “palo al agua”. Que las urnas y los votos de los militantes decidan Se supone que estamos en democracia
En un sistema democrático no tendría que existir ningún problema, se acude a las urnas y se acabó el conflicto. Aquí al parecer no y cuando ocurre algo normal,  que un militante quiera ser presidente se monta la de San Quintín porque algunas élites, o que así se creen, consideran que eso no es posible. Lo ideal es que surgiesen varias candidaturas porque significaría que los partidos están vivos y sería una inyección vitalizadora y fortalecedora del sistema de partidos. Por ese motivo Cospedal ni Maillo deberían de intervenir y que fuesen los militantes los que optasen por una, dos, tres o cuatro candidaturas que se presenten. El Partido Popular y más concretamente sus líderes deberían dar ejemplo de democracia y optasen, no a que el presunto problema lo arreglen en Madrid, sino que fuesen los militantes los que decidiesen porque son los únicos soberanos. Malo será que las diferencias, que no existen, salvo las personalistas, se ventilen en los despachos y a espaldas de militantes y simpatizantes.

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