Dr. Crespo, Jefe de digestivo de Valdecilla: `A nivel estatal desde abril de 2015 se han curado casi 65.000 pacientes con enfermedades hepáticas`

Sin profundizar mucho, que le dejamos a él, les podemos decir que el doctor Javier Crespo García formó parte del grupo de expertos designado por el Ministerio de Sanidad para el uso de los medicamentos de última generación contra la hepatitis C.

Haciendo un recordatorio hace aproximadamente dos años se conoció un tratamiento revolucionario en la curación del virus de la Hepatitis C que trajo un enorme debate ya que este tratamiento es enormemente costoso y se trataba de dirigir sus primeras actuaciones a los enfermos más graves.

Este avance en la medicina fue determinante para la salud de muchas personas que padecen este tipo de enfermedades hepáticas, sino que tiene una curiosidad, ya que este tratamiento farmacológico regenera el hígado.

ALA.- ¿Es así doctor? ¿Nos hemos equivocado en la exposición? Díganos exactamente la función del Jefe de digestivo de Valdecilla y su equipo.

Dr. Crespo.- Yo creo que lo has explicado perfectamente, el virus de la hepatitis C se conoce desde hace el año 1989, aunque se intuía su presencia desde hace más de 50 años. Y desde el año 1989 hasta el año 2012 pues la verdad es que no teníamos oportunidad de curarle prácticamente nunca o en muy contadas ocasiones.

En el año 2012 surgen unos nuevos medicamentos que les llamamos agentes antivirales directos de primera generación, y ya pasamos de curar a 2 o 3  personas de cada 10, a curar a 6 o 7. Ya es un avance significativo, pero con muchos efectos secundarios. Y a partir del año 2014 podemos curar a 97 de cada 100 personas, es decir, a la práctica totalidad.

Es un avance impresionante, pero se acompañó de un aspecto negativo: el altísimo coste de los fármacos, lo que ocasionó, en un primer momento, una alarma social debido a que solo podíamos administrar el tratamiento a unos pocos enfermos, evidentemente a los más avanzados, pero a muy pocos. Por suerte, a fecha de hoy España es el país avanzado que más enfermos ha tratado del Mundo en relación a su población. De hecho, hemos tratado desde que tenemos el Plan Nacional (abril del 2015), es decir hace un año y medio, cerca de 65.000 pacientes y en este caso, decir tratamiento es casi sinónimo de curación. Es decir, se han curado casi 65.000 pacientes sin ningún efecto secundario. Evidentemente esta situación supone un enorme orgullo para nosotros, y por lo tanto, yo me siento especialmente contento por nuestra contribución.

ALA.- Usted y su equipo son una referencia a nivel nacional, y muestra de ello todas sus conferencias, investigaciones, avances y su labor profesionalidad, me atrevería a decir, que son punteros internacionalmente. Por ejemplo, ¿qué relaciones mantienen con otros hospitales? ¿Qué avances o investigaciones avalan lo anterior?

Dr. Crespo.- Lo primero que tendría que decir, y es además de justicia, es que las personas que forman parte del equipo son, no solo necesarias, sino que son absolutamente imprescindibles y son las que hacen la mayor parte del trabajo porque yo gracias a Dios dispongo de un equipo de primerísimo nivel, que no solo son médicos, la verdad es que en este momento hay médicos, hay enfermeras, hay un biotecnólogo, hay un químico, en fin…es un equipo multidisciplinar muy amplio.

Por suerte sí que hemos contribuido en algunas ocasiones. A nivel nacional hemos creado, junto con otros médicos de España, de los que voy a citar a una persona, que es muy amigo mío, José Luis Calleja, que es el verdadero ‘corazón’ del grupo, una base de datos que llamamos ‘Hepa-C’, que sirve para comaprtir la experiencia de una gran parte de los médicos que nos dedicamos a la ‘Hepatitis C’. Hemos podido juntar la experiencia en varios miles de pacientes, que no es fácil, y como consecuencia de esta acción se van a publicar o se han publicado ya eocho trabajos de primer nivel internacional, en las mejores revistas de la especialidad, que son ‘Hepatology’, ‘Journal of Hepatology’, ‘Clínical Gastroenterology and Hepatology”, ‘Transplantation’. Y las mejores revistas van a tener nuestros datos; en ese aspecto también estamos contentos.

A nivel internacional hemos enviado a una persona que es Joaquín Cabezas, a Carolina del Norte durante un año, otra persona ha estado en Inglaterra durante otro año. Tenemos una persona ahora en Paris que también va a estar en una estancia de un año. Tenemos ahora muchas relaciones nacionales e internacionales para seguir avanzando en este aspecto.

ALA.- Quisiéramos preguntarle también por una noticia de salud que parece prometedora pero que nosotros no conocemos en intensidad su realidad. Esta noticia que ha salido en los medios de comunicación hace escasos días, dice de un nuevo mecanismo de progresión y regresión de la fibrosis en el hígado después de conocer los cambios químicos de las proteínas hepáticas. ¿Nos lo puede traducir para que entendamos el avance tan importante que se está produciendo?

Dr. Crespo.- Lo han hecho en el ‘BioGUNE, lo ha hecho la doctora María Luz Martínez Chantar, con la cual colaboramos, y de hecho en este trabajo nosotros firmamos también el trabajo. Nuestra colaboración aunque pequeña tiene cierta importancia dado que hemos aportado material de nuestros pacientes, y por lo tanto, tiene cierta importancia.

Básicamente, el hígado tiene pocas formas de enfermar. La enfermedad se inicia con un proceso inflamatorio. Da igual la causa de la inflamación: una hepatitis, el consumo de alcohol, una enfermedad metabólica, una enfermedad congénita, el hecho es que se inflama. Una vez que se ha iniciado la inflamación, el organismo intenta detener ésta, mediante diferentes células. Pero para detener la inflamación, muchas veces se produce la muerte de algunas células. Y, después de la inflamación y de la muerte de algunas células, se produce un proceso de reparación. El mantenimiento de este círculo de inflamación y reparación es lo que produce la fibrosis (las cicatrices) y cuando se mantiene de forma indefinida se va produciendo el cambio de un hígado normal (blando y esponjoso) a un hígado cada vez más duro (fibrótico y finalmente, cirrótico). De una forma práctica, la enfermedad hepática crónica induce el cambio de un hígado sano (como una esponja) a un hígado cirrótico (como una piedra pómez).

La fibrosis, esas cicatrices, es algo que es común a todas las enfermedades y la doctora María Luz Martínez Chantar lo que ha descubierto es que existe un proceso químico que se llama ‘nedilación’, que hace que cuando este proceso está activado de forma continua, las células encargadas de producir cirrosis están hiperactivas, y por lo tanto, si somos capaces de bloquear ese proceso que llamamos nedilación’ las células capaces de producir la ‘cirrosis’ entrarían en un proceso de regresión y morirían espontáneamente,  y por lo tanto, no se produciría la ‘fibrosis’. Esas heridas y esas cicatrices irían regresando poco a poco. Yo creo que es un proceso muy interesante.

Hablamos de una inflamación continuada porque cuando hay una inflamación aguda, por ejemplo, una ‘hepatitis’ aguda normalmente el hígado es capaz de resolverla solo, ….algunas veces la inflamación es tan intensa que da lugar a un proceso que te puede matar, pero eso es muy raro. La inflamación aguda se resuelve en más o menos tiempo. Esto es una inflamación crónica, es decir, ingesta crónica de alcohol, infección por el virus de la ‘Hepatitis C’, o por el virus de la ‘Hepatitis B’, continuamente. Es la primera vez que se describe en enfermedades hepáticas; se había y descrito alguna vez en cáncer también, pero , como digo, es la primera vez que se describe en enfermedades hepáticas no relacionadas con el cáncer. Abre expectativas terapéuticas muy interesantes.

ALA.- Y por último doctor, ¿qué aconsejaría a sus pacientes enfermos en materia hepática?

Dr. Crespo.- Si, tres consejos:

-         - Uno que acudan a su médico, que hagan caso a su médico. Con mucha probabilidad les darán consejo certeros;

-     - Dos que no tomen productos naturales no aconsejados por su médico (entre los productos naturales también está el veneno de cobra, y el opio, supernaturales, pero nocivos). Todo lo natural no es bueno, aunque se lo aconseje con el máximo cariño su amigo, su vecina, en fin.  alguien que no es experto;

-          - Y tres, obviamente un consejo que es de sentido común, no tomen alcohol. El alcohol y las enfermedades del hígado se llevan especialmente mal.

Y quizá un cuarto consejo general, no hagan una dieta de protección hepática, eso no existe. Hagan caso a su médico.

Muchas gracias doctor Crespo. Todo nuestro agradecimiento por sus palabras.